Aislar una vivienda ofrece muchas ventajas como que mejora la calidad de vida en un hogar e incluso puede generar un importante ahorro energético y reducir las facturas de luz o gas. Pero estas son las ventajas más conocidas, en este artículo vamos a descubrir todos los motivos por los que debes aislar tu vivienda si todavía no lo has hecho.
- Mejora la calidad de vida
Como ya hemos indicado con brevemente al comienzo de este artículo una de las principales ventajas que ofrece aislar una vivienda es que mejora la calidad de vida de todas las personas que habitan en el hogar. Esto se debe a que se reduce el ruido que penetra en el interior de la casa, así como la temperatura es mucho más agradable, más cálida en invierno y ligeramente más baja en verano.
Respecto al ruido conseguirás que los sonidos típicos de la calle producidos por el tráfico o los transeúntes no penetren en el interior. Pero también evitarás tener que oír las discusiones de tus vecinos, la música que provenga de otras viviendas o los sonidos habituales de un edificio como el ruido del ascensor o los pasos de los vecinos de arriba al caminar.
- Se consigue ahorro energético
Otra de las principales ventajas que aporta aislar una vivienda es que puede suponer un importante ahorro energético en el hogar. Como ya hemos señalado el asilamiento genera que en las viviendas haya temperaturas más agradables, con temperaturas más altas en el interior en invierno porque se evita la pérdida de calor. Así, se aprovecha mejor la calefacción al no producirse fugas de calor por un mal o deficiente aislamiento.
Pero también en verano se puede disfrutar de temperaturas ligeramente más frescas, ya que el calor que incide en el edificio no penetra directamente en el interior del piso o casa en cuestión. Por lo que también puede ser necesario encender menos el aire acondicionado. Además, en el caso de que se encienda el frío se quedará dentro de la vivienda al no haber fugar porque la vivienda dispone de un correcto aislamiento.
Todas estas cuestiones se traducen un ahorro energético y un descenso considerable del consumo, por lo que las facturas eléctricas son más bajas con un buen aislamiento térmico. Según los expertos se estima que se recuperan 7 euros por cada euro invertido en aislamiento y se puede ahorrar hasta un 80% de las facturas de la calefacción. En definitiva, la mejora del aislamiento de una vivienda es una inversión interesante.
- La instalación puede ser sin obras
También hay que destacar que la instalación del aislamiento se puede realizar sin la necesidad de hacer obras. “La instalación del aislamiento insuflado se puede realizar sin obras, ya que tan solo se realizan unos pequeños agujeros en la pared por donde se proyecta el insuflado. Además, utilizamos la maquinaria más especializada y puntera en el sector que permite reducir considerablemente el tiempo de ejecución”, explican desde Crearsur, empresa especializada en ventanas de PVC en Granada que también realiza trabajos de aislamiento en viviendas.
- Permite reducir la probabilidad de sufrir humedades
Otra ventaja interesante de apostar por el aislamiento en una vivienda es que se reduce considerablemente la probabilidad de sufrir humedades. En muchos pisos, especialmente antiguos o en edificios construidos hace más de 40 años, suele haber problemas de condensaciones y humedades. Unos problemas cuya razón se debe a un mal aislamiento o incluso inexistente.
Y es que cuando no hay aislamiento entre la pared exterior e interior de un edificio, o el aislamiento se encuentra en mal estado, se crea una diferencia de temperatura. Esta diferencia en el mercurio provoca que la humedad del ambiente, la que se genera de manera natural al respirar o cocinar se condense en forma de agua en la pared. Dando así como resultado a humedades.
Como solución a estos casos se puede apostar por el aislamiento. Al instalar un material aislante entre el interior y el exterior de la vivienda se acaba con el problema de las humedades. Y no sólo eso, conseguirás todas las ventajas anteriormente enunciadas en este artículo.
En resumen, estos son los motivos por los que no deberías dudar en mejorar el aislamiento de tu vivienda. Podrás disfrutar de una mejor calidad de vida, no sufrir los molestos ruidos del exterior, evitarás humedades y lo mejor es que ahorrarás en las facturas y la instalación se puede hacer sin la necesidad de obras.