A la hora de diseñar y proyectar un jardín, lo primero que se nos viene a la cabeza son las zonas verdes llenas de plantas de flor, césped y árboles. Sin embargo, para que el resultado final sea cómodo y armonioso no debemos olvidar la planificación de lo que serán los nexos de unión de las distintas zonas de nuestro jardín (zona de descanso, de comidas o cenas, la piscina, juegos infantiles…) como son los caminos, paseos, superficies de áridos, etc.
Según el destino que deseemos para estos nexos de unión, su construcción puede ser:
- Superficie compactada. Se denomina así a la superficie del suelo que se encuentra en un desequilibrio entre los macroporos y microporos del suelo, dando como resultado una masa de suelo más densa que obstaculiza el drenaje del agua y su oxigenación, con un menor o nulo desarrollo de plantas y de raíces. En jardinería se realiza principalmente para la construcción de caminos, zonas de tránsito entre el césped, acceso a la piscina, acceso a estancias secundarias, el sendero hacia la pérgola, para ir al huerto, etc. La compactación se produce generalmente por la utilización de maquinaria, que en el caso del jardín se realiza concretamente mediante un rulo hasta que la superficie se encuentra bien apisonada. Así, el mantenimiento de estas superficies se centra principalmente en el control de las hierbas que nacen espontáneamente, pues no se recomienda la colocación de malla antihierbas pues al compactar la superficie podría ocasionar problemas de drenaje o incluso podría aflorar con el tiempo. Una vez retiradas las malas hierbas una sopladora o una escoba de jardín bastaran para mantener la superficie compactada en perfecto estado.
- Superficie no compactada. Se denomina así a las superficies que suelen albergar elementos no vegetales como casetas, esculturas, juegos de niños, rocallas, etc. pero también árboles y arbustos. En este tipo de superficies se recurre a su relleno con materiales tan diversos y decorativos en jardinería como corteza de pino, virutas de madera, gravilla, cantos rodados, etc. por lo que por lo general es importante y conveniente delimitar la superficie no compactada mediante elementos como borduras metálicas, traviesas de madera, bordillos de piedra, madera, ladrillo, etc. de lo contrario estos materiales acabaran dispersándose por el jardín e invadiendo todo lo que esté a su alrededor. Muy importante también es colocar una lámina o malla geotextil sobre la tierra y antes del relleno de gravilla, virutas de madera, etc. para impedir o mantener bajo control la irrupción de malas hierbas.
Otro acceso fundamental hacia nuestro jardín es el acceso al garaje o zona de aparcamiento. Aquí, nuestra recomendación pasa porque la mejor opción que podremos utilizar es un aglomerado asfáltico en frío. En este sentido, en relación calidad precio, nosotros os invitamos a pasaros por Aglomerados GB, dado que, además de tener unos productos de primera calidad, su proceso de fabricación cumple rigurosamente la normativa medioambiental vigente.
Plantas aromáticas para el jardín
Se denominan plantas aromáticas aquellas que se caracterizan por contener sustancias que generan aromas por lo que son muy utilizadas en medicina, la cocina mediterránea, perfumería y jardinería. Las más conocidas y utilizadas son las pertenecientes a la familia de las lamiáceas:
- Es una planta perenne que alcanza una temperatura máxima de 120 cm, con espolones o brotes laterales que la pueden convertir en invasiva, si no se controla. Sus hojas son rugosas, de un verde brillante. Su aroma es intenso, fresco y anisado. Se puede ingerir fresca, seca o en infusión. Muy utilizada por sus propiedades antiinflamatorias y por despejar las vías respiratorias.
- Orégano. Es una planta perenne con forma de arbusto que puede alcanzar los 45 cm. de alto. Sus hojas son alargadas y anchas. Se utiliza en la medicina tradicional por sus numerosas propiedades, digestivas, para tratar catarros, tos, enfermedades respiratorias, antiséptico, antiinflamatorio, antioxidante, antibacteriano, calmante… fuente de vitaminas y minerales y por supuesto condimento esencial de la pizza italiana.
- Es una planta perenne arbustiva de cuyos tallos con hojas enteras, salen unos pequeños racimos con flores llamativas de color azul, rojo, blanco… Su nombre proviene del latín y significa “curar”, “salvar”, sus propiedades son numerosas, estimulador del apetito, antioxidante, cicatrizante, regeneradora de la piel, vigorizante, antiespasmódico, astringente, antiinflamatorio…
- Es una planta perenne, subarbustiva con un tamaño que no supera los treinta centímetros de altura, sus hojas son abundantes y alargadas, de tamaño diminuto, entre 6 y 8 mm. de longitud, de color verde oscuro, su floración, entre abril y septiembre, son flores pequeñas de color blanco o violáceo. Entre sus propiedades podemos destacar: bactericida, digestivo, cólicos abdominales, expectorante…