Bien sea por una nueva apertura, para solventar desperfectos o simplemente para lavarle la cara al local, los negocios acostumbran a realizar reformas cada cierto tiempo. Es una inversión que pretende atraer nuevos clientes, generar más ventas y crear un espacio más cómodo de trabajo. No lo podemos ver como un gasto. Se trata de una actuación que a la larga nos va a generar beneficios.
Dice el periódico El Economista que en Barcelona hay 70.000 locales comerciales. De ellos, aproximadamente, 30.000 están disponibles. La cifra casi se duplica en Madrid. Existe una abundancia en estos momentos de locales, tanto en venta como en alquiler, que favorece la apertura de negocios.
En todos estos casos es necesario realizar una reforma antes de abrir. Primero, porque vamos a ubicar un negocio distinto al que hubo en su día, y segundo, porque es probable que debamos reparar algunas cuestiones para que el local sea operativo.
Reformar un local siempre es una bocanada de aire fresco. Basta con pensar en el programa “Pesadilla en la cocina”, presentado por el chef Alberto Chicote. El cocinero se dedica a visitar restaurantes en ruina económica y tras detectar los problemas que existen y poner en su sitio a propietarios y empleados, la alternativa concreta que ofrece es un cambio de carta y una reforma del restaurante.
Y es que al reformar el local es como si abriéramos uno nuevo. Tiene ese efecto psicológico sobre los clientes y sobre las personas que trabajan en él. Es como darle una nueva vida. Por eso, muchos propietarios, cuando van a reparar cualquier desperfecto, se plantean hacer una reforma más profunda.
Por poco que quieras hacer, siempre es bueno ponerte en manos de una empresa de reformas integrales. Así nos lo cuenta Mario, quien para reformar su restaurante en El Campello (Alicante) busco asesoramiento en los arquitectos de Vale Up, una empresa de reformas que trabaja en la provincia, y nos ha comentado que está contento con el resultado pero está aún más contento de cómo se gestionó la reforma por parte de la empresa. De esta forma consiguió darle un aire nuevo a su local.
Estas son las reformas más habituales que se acometen en los locales comerciales.
Redistribución del espacio.
La renovación de la distribución del espacio en un local es un proceso que busca reorganizar la disposición de los elementos y áreas dentro del establecimiento. Consiste en hacer cambios estructurales y funcionales para adaptar el espacio a las necesidades del negocio y mejorar la eficiencia operativa. Esta reforma puede transformar por completo la apariencia y la funcionalidad del local.
La renovación de la distribución del espacio implica una serie de acciones para lograr un diseño más eficiente y atractivo. En primer lugar, se realiza un análisis detallado de las necesidades y objetivos del negocio. Se consideran aspectos como el flujo de clientes, la exhibición de productos, las áreas de atención al público y las zonas de almacenamiento.
A partir de este análisis, se diseñan nuevos planos y se definen las áreas específicas dentro del local. Esto puede incluir la reubicación de estanterías, mostradores, zonas de exposición, puntos de venta y áreas de descanso o espera. Se busca maximizar el espacio disponible, mejorar la circulación de los clientes y facilitar el acceso a los productos y servicios.
Durante la renovación, se llevan a cabo tareas como la demolición de paredes o tabiques, la instalación de elementos de separación como mamparas o biombos, y la modificación de la distribución eléctrica y de fontanería, si es necesario. También se pueden agregar o modificar puertas y ventanas para mejorar la entrada de luz natural y crear una sensación de amplitud.
El resultado final es un local comercial completamente transformado, adaptado a las necesidades del negocio. Los clientes experimentarán un entorno más funcional y agradable. Además, los trabajadores se sentirán más cómodos con esta nueva reubicación y eso repercutirá en un aumento de la productividad.
Mejoras de fachadas y escaparates.
El Diario de Navarra alerta en uno de sus artículos sobre el estado de suciedad en el que se encuentran las fachadas de las tiendas del área del ensanche de Pamplona. De la financiación de la limpieza se encargarán el Ayuntamiento y la Asociación de Comerciantes.
Esto que sucede en Pamplona, es lo habitual en todas las ciudades de España. Principalmente en las zonas comerciales que ocupan calles con mucho tránsito de vehículo. Por el efecto de la contaminación, las fachadas de las tiendas terminan acumulando suciedad y dan una imagen de abandono, que no se corresponde con la realidad.
La limpieza y pintura de las fachadas son uno de los trabajos que más se suelen realizar en la reforma de los negocios. Pero no solo se queda ahí. Estas acciones se suelen complementar con la colocación de rótulos, elementos de iluminación y remodelación de escaparates.
Reformas eléctricas y en la iluminación.
Los cambios en la iluminación juegan un papel fundamental en la renovación de un local comercial. Transforman por completo la atmósfera y la apariencia del espacio. Este proceso implica realizar acciones para mejorar la iluminación existente y lograr un ambiente más atractivo y funcional.
En primer lugar, se realiza un análisis detallado de la iluminación actual. Se evalúa el tipo de luminarias, la distribución de la luz, la intensidad y el color de la iluminación. A partir de esta evaluación, se determina si es necesario realizar cambios para crear un entorno más adecuado.
Una de las acciones más comunes es la sustitución de las luminarias existentes por otras más eficientes y modernas. Se pueden instalar luces LED, que tienen una mayor eficiencia energética y una vida útil más larga. Además, las luces LED permiten ajustar la intensidad y el color de la luz, lo que brinda la posibilidad de crear ambientes personalizados y adaptados a la imagen de la marca o al tipo de negocio.
Otra acción importante es la planificación en la distribución de las lámparas. Se identifican las áreas clave que requieren una iluminación destacada, como las zonas de exposición de productos, los escaparates o los espacios de atención al público. Se instalan focos direccionales y luces puntuales para resaltar determinados elementos.
Además, se pueden incorporar elementos decorativos, como lámparas colgantes o apliques de pared, para agregar un toque de estilo y personalidad. Estos elementos contribuyen a crear una atmósfera acogedora.
El resultado es un local comercial con una iluminación mejorada y más adecuada a las necesidades del negocio. La nueva iluminación resalta los productos o servicios, crea un ambiente agradable y contribuye a mejorar la experiencia del cliente. Asimismo, una iluminación adecuada mejora el estado de ánimo de los empleados y aumenta su productividad.
Renovación de suelos y paredes.
La renovación de suelos y paredes es una parte fundamental de la transformación de un local comercial. Por un lado, es una acción necesaria en cuanto al aspecto higiénico, y por otro, mejora la apariencia.
En cuanto a los suelos, se pueden realizar diversas acciones, como la eliminación del revestimiento antiguo, ya sea baldosas, moquetas o laminados, y la instalación de un nuevo material que se adapte a las necesidades del negocio. Se pueden utilizar opciones como cerámica, madera, vinilo u hormigón pulido, dependiendo del estilo y la resistencia requerida. Además, se pueden aplicar técnicas de nivelación y pulido para obtener una superficie uniforme y libre de imperfecciones.
En lo que respecta a las paredes, se pueden llevar a cabo acciones como el revestimiento con nuevos materiales, como pintura, papel pintado, paneles de madera o revestimientos de piedra, ladrillo, etc. Estos cambios ayudan a mejorar la estética y crear una atmósfera acorde con la imagen del negocio. También se pueden realizar trabajos de reparación de grietas o imperfecciones en las paredes existentes antes de aplicar los nuevos revestimientos.
El resultado final es un local comercial con una apariencia nueva y actualizada. Los nuevos revestimientos contribuyen a crear un ambiente atractivo y reflejan la identidad de la marca o del negocio. Además, la elección de materiales duraderos y de calidad garantiza una mayor resistencia al desgaste y una fácil limpieza y mantenimiento.
Climatización del local.
Otra reforma que se suelen realizar bastante en los locales comerciales es la instalación y mejora de sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado. La climatización del local tiene un efecto directo en la afluencia de público y en el aumento de las ventas. Si la gente se siente a gusto en nuestro local, se quedará más tiempo y gastará más dinero.
Esto lo sabemos la gente que hemos trabajado cara al público. En invierno, la gente que pasea por la calle huye del frío y se refugia en las tiendas. Si estas tienen una temperatura agradable, alargan su estancia, con la posibilidad de aumentar el ticket de venta.
También sucede en verano. Donde el calor agobiante empuja a la gente a los bares, restaurantes y áreas comerciales. Grandes empresas como El Corte Inglés colocan sus centros comerciales en las áreas más transitadas de las ciudades y cuidan al detalle la iluminación y climatización, para que el viandante pase el máximo tiempo posible en sus instalaciones.
Si te estás planteando una reforma en tu local comercial, estos son aspectos que vale la pena revisar para mejorar la apariencia y operatividad de tu negocio.