El sueño, constituye una actividad reparadora y fisiológicamente necesaria que además nos ayuda a mantenernos despiert@s durante el día. El ser humano no puede vivir sin dormir, de hecho, después de 3 días despierto, empieza a fallar el cerebro, pudiendo producirse daños irreparables e, incluso la muerte. Está comprobado que las personas que duermen menos de 7 horas diarias de forma continuada, podrían sufrir graves problemas de salud a largo plazo.
Nos pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo y por eso un buen descanso es fundamental. Si notas que ya no descansas como antes, que te levantas de la cama como si no hubieras dormido bien, si sientes que tu sueño no ha sido reparador, igual lo que necesitas es cambiar de colchón. Colchones de primera los podemos encontrar en Círculo Muebles, una tienda online que te ofrece diferentes sistemas de descanso, somieres y bases, canapés, colchones de látex, viscolástico y muelles. Porque si quieres disfrutar de un sueño reparador es fundamental que elijas el sistema de descanso más adecuado para ti.
El sueño es necesario en todas sus fases, ya que cada una de estas supone la reparación de una función específica. Por ejemplo, el sueño profundo contribuye a la reparación del cuerpo, mientras que la fase REM, favorece la reparación mental, incidiendo directamente en los procesos de aprendizaje, concentración y memoria.
El dormir continuadamente en una cama que no es la adecuada podría llegar a provocar insomnio u otras patologías del sueño, y por lo tanto, el sueño no llegaría a ser lo reparador que debería, pudiendo llegar a ocasionar graves problemas físicos y cognitivos. De ahí la importancia de un buen colchón.
Si no dormimos bien, no solo estaremos fatigad@s al despertarnos, si no que, además, nuestra capacidad de concentración, nuestra memoria, nuestra agilidad mental, nuestro rendimiento y nuestro humor, entre otras cosas, se verán gravemente deteriorada.
Los peligros de la falta de sueño
Se sabe que una buena parte de la población mundial sufre algún tipo de trastorno del sueño como insomnio, síndrome de las piernas inquietas, narcolepsia…
La periodista Adela Úcar experimentó en su programa 21 días, los efectos de la falta de sueño. Para ponernos en la piel de esas personas que sufren insomnio, Adela, se sometió a una vigilia extrema de 60horas, un experimento controlado por la Universidad de Granada. Las consecuencias de esta ausencia de sueño durante tantas horas, provocaron en la periodista diferentes efectos, tanto a nivel físico y mental como conductual: falta de reflejos, irritabilidad, cambios de humor, pérdida de memoria, falta de coordinación en los movimientos, fatiga, etc…
Pero la persona que más tiempo se ha pasado sin dormir es Andy Gardner, un joven estudiante que a modo de experimento, pasó 11 días sin dormir, a fin de comprobar por sí mismo los peligrosos efectos de una vigilia continuada.
Otras personas intentaron superar el record de Andy, para demostrar todo lo contrario, que la función cognitiva no se ve alterada por la falta de sueño, pero no lo consiguieron.
Permanecer, aunque sea una sola noche sin dormir, provoca unos efectos visiblemente negativas en el ser humano. Los síntomas más frecuentes de haber pasado, por ejemplo, una noche de fiesta, son los siguientes:
- Fatiga física y mental. El rostro se ve apagado, cansado y la actividad mental ralentizada.
- Falta de concentración y de coordinación.
- Pérdida de memoria
- Ansiedad y hambre extrema
- Cambios de humor
- Hipersensibilidad
- Sensación de tristeza
Pero a largo plazo los efectos de la falta de sueño, son todavía más graves. No dormir de forma adecuada de forma continuada puede traer a largo plazo, problemas y enfermedades, muchas veces, letales:
- Obesidad
- Derrame cerebral, ictus
- Infartos y problemas cardíacos
- Diabetes
- Cáncer
- Impotencia
Parece evidente que la falta de sueño es muy peligrosa, pero aun así, son muchas las personas que todavía no son realmente conscientes de ello y juegan con su salud a diario durmiendo menos horas de las que necesita. Si eres de esas personas, ya es hora de que tomes conciencia del problema y empieces a adquirir buenos hábitos de sueño.